Tanto tiempo sin verte...
que linda cita la de ayer.
Dama blanca.
Sigue siendo...
tan perfecto como antes.
viernes, 25 de noviembre de 2011
:).
Me encuentro conociendo nuevos momentos perfectos, descubriendo sonrisas, y estados, me encuentro con maripositas en la panza, sonrisas al despertar y su rostro antes de viajar a otros mundos; de esos sentires que el tiempo hace creer, que jamas hemos vivido...desde sus groserias, hasta sus muestras de cariño, él en mi vida se ha convertido en sinónimo de felicidad.
sábado, 19 de noviembre de 2011
Para tus flores de papel.
Las cosas acabaron demasiado pronto como para ser trascendentes, pero de esos tiempos remotos hay quizá dos cosas que jamás olvidaré: El sonido del cristal cayendo sobre el suelo y aquellas flores sin sentido que pusiste en el florero; tú y yo desde el principio teníamos claro que el futuro no rimaba con nosotros, pero como tontos nos encargamos de alimentar un amor inexistente, como ya sabes, mi necesidad de estructuración y orden me obliga a empezar a contarnos los errores desde el día que nos cruzamos sin mucho en común y con demasiadas de tus heridas, me resulta inconcebible y hasta ofensivo admitir que te abrí las puertas de mi juego. Por eso ahora que, después de tantos años nos encontramos de nuevo, más serenos y espero que también más maduros, puedo intentar hablarte de amor...nunca fui de esas mujeres entregadas a esos sentires, y te confieso que sigo sin serlo, pero últimamente he estado pensando en ti, sí en ti, no en el ¨nosotros¨ porque sinceramente para mí nunca existió, aunque pude recordar con algo de ternura el brillo de tus ojos el día del final; llegaste algo contento a casa, traías chocolates y un fuerte aroma a deseo plasmado en tu cuerpo, yo me encontraba sentada pensando, absorta en mi cabeza y saboreando entre el vino y el cigarrillo esos pequeños toques de ausencia de ti, ausencia que efectivamente arruinaste al llegar.
Solías decir que ¨nunca pegabas una conmigo¨, detrás de esas palabras tu rostro gritaba frustración...y yo, algo cruel, sonreía, me resultaba gracioso ver como te alterabas, tu preocupación absurda como si te importaba, todo era tan similar a una parodia, aún me causa gracia, quizá por coincidencia, o porque al fin tus deseos fueron escuchados...y efectivamente ¨la pegaste conmigo¨, fue con aquel gesto de ira, dejaste atrás tu complacencia y sumisión, ésa noche después de escucharte tantas horas, mientras te quejabas y lloriqueabas, mientras yo en silencio tarareaba alguna canción, entró la calma, callaste y con un toquesito en tu hombro, dije fuerte y claro: -Amor, ¡esto se acabó!
Fue tanta tu ira, que tomaste con tus manos el florero de cristal, que habíamos comprado juntos, solo para colocar flores de papel, inútiles, inmóviles, sin aroma, ni personalidad debido a tus alergias, tomaste quizás el objeto que para mi tenia mas valor, en esas cuatro paredes y lo arrojaste, vi llover y salpicar millones de cristales que reflejaban la luz mientras caían, y tu...tú te fuiste para siempre de mi vida y hoy que apareces de nuevo te confieso que después de eso QUIZÁ me enamore de ti.
-dulce, puro e inexplicable
porque ya es tarde.
Amérika Guerrero.
domingo, 13 de noviembre de 2011
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